5 técnicas sencillas para la Sabiduría bíblica para problemas
5 técnicas sencillas para la Sabiduría bíblica para problemas
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1. Apreciar el inclinación de Dios: El sacrificio de Jesús es una muestra extraordinaria del bienquerencia de Dios alrededor de nosotros. Nos amó tanto que estuvo dispuesto a sufrir y caducar por nuestros pecados.
Él aún nos recuerda la importancia de ser firmes en nuestra Convicción y no renunciar a ella en presencia de el rechazo de las personas.
Estas lecciones son relevantes no solo para aquellos que viven en momentos de persecución religiosa, sino igualmente para los creyentes contemporáneos que luchan por sostener sus principios y convicciones en un mundo cada ocasión más hostil.
Al enfrentar la persecución, Jesús nos dice que no debemos temer a los seres humanos que pueden matar solo el cuerpo, sino al Señor que tiene el poder sobre el alma y el cuerpo.
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La hostilidad y el odio por seguir a Jesús son realidades que enfrentamos como creyentes en un mundo cada oportunidad más hostil al mensaje de la Convicción. Sin embargo, debemos memorar que somos parte de una historia mucho decano que nosotros mismos.
En medio del odio y la hostilidad, el discípulo debe tener una Certidumbre firme en Dios y ser declarante robusto ante el rechazo de la gente. No importa cuán dura sea la persecución, Jesús quiere que sus seguidores sigan predicando el evangelio.
Y esta esperanza no nos defrauda, porque Dios ha llenado con su inclinación nuestro corazón por medio del Espíritu Santo que nos ha cubo.
Su sufrimiento y muerte fueron necesarios para cumplir esta obra redentora, demostrando Vencedorí su inclinación incondicional por nosotros.
No es que a la pasión de Jesús le falte poco, pero ha dejado un punto para que incorporemos a ella nuestros propios sufrimientos, haciéndolos valiosos y con sentido.
Mis huesos se quebrantan por la burla de mis adversarios; mientras me preguntan sin cesar: «¿Dónde está tu Dios?»
La crucifixión de Jesús es uno de los eventos más importantes en la historia del cristianismo. La imagen de Jesús clavado en la cruz es un símbolo de sacrificio y redención para millones de personas en todo el mundo.
Esto significa que cada parte de nuestro cuerpo y vida es importante para Él, y debemos tener la misma atención a los detalles en nuestra vida diaria.
Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesús, quien según su excelso misericordia nos ha hecho venir al mundo de check here nuevo para una esperanza viva por medio de la resurrección de Jesucristo de entre los muertos (1 Pe 1:3).